Pero mientras los diplomáticos vendían el acuerdo como un paso en el camino hacia la paz, el mismo sábado varios bombardeos aéreos de origen desconocido dejaron 58 personas muertas en la ciudad de Idleb, 12 civiles muertos en los barrios rebeldes de Alepo y 18 víctimas más en otras localidades de la misma provincia, según un último balance del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). El acuerdo firmado en Ginebra el viernes entre el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, y el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguei Lavrov, entrará en vigor mañana, primer día de la fiesta musulmana del Eid al Adha. La agencia gubernamental siria SANA informó que el Gobierno aprobó el acuerdo y el cese de hostilidades comenzará en Alepo por razones humanitarias.
“Esta tregua puede ser más eficaz que la precedente porque puede detener los bombardeos contra los civiles y la oposición”, afirmó el emisario estadounidense para Siria, Michael Ratney. afp