Con el deseo de generar un cambio en la educación paraguaya, más de 50 alumnos del CNC tomaron el colegio desde las 20.00 “como medida suprema”. Exigen la renuncia de la ministra Lafuente, y aseguran que “si es necesario rememorar el 23 de octubre de 1931, lo haremos”.
“Todos los muchachos dijimos que tenemos que ponernos las pilas, la historia nos obliga una vez más a ser partícipes de esto. Estamos vigilando que los agentes policiales no ingresen, no nos sentimos seguros en este lugar”, mencionaron varios alumnos en contacto con la RPC.
Expresaron sentir un saboteo hacia todo el sector estudiantil ya que varios colegios que se encuentran en vigilia soportaron minutos de cortes en la energía eléctrica. “Hubo un apagón y creemos que fue ocasionado, nos están saboteando a los estudiantes, nos están amedrentando”, resaltaron.
Insistieron en que alrededor de 50 alumnos están dentro del colegio, algunos se encuentran vigilando perímetros ante la postura de agentes policiales que supuestamente amenazaron con ingresar al predio.
Por su parte varios padres alientan las iniciativas de los jóvenes a pesar de la angustia y la preocupación, y se acoplan al pedido de renuncia de Marta Lafuente.
“Si tenemos que caer como aquellos estudiantes que fueron asesinados en 1931, lo haremos, no nos vamos a mover de acá. Queremos formar parte de la historia de nuestro país”, mencionaron recordando aquella masacre del 23 de octubre de 1931.
Explicaron que ellos, hace 14 horas, ya habían adelantado que si el Gobierno no daba una respuesta a sus pedidos, tomarían el colegio. Intimaron a Lafuente y asintieron que “si en 48 horas la ministra no presenta renuncia, vamos a tomar medidas más radicales”.
“Si es necesario rememorar el 23 de octubre lo haremos”, añadieron, rememorando la época gobernada por José P. Guggiari, cuando varios estudiantes, entre ellos del CNC, se mostraron en contra del actuar del Estado ante la invasión de tropas bolivianas en el chaco paraguayo.
Grupos de líderes estudiantiles del centro de estudiantes del Colegio el Nacional de la Capital apoyados por estudiantes del Colegio Internacional, del San José, del Presidente Franco y del Colegio Nacional Asunción Escalada decidieron salir de clases para protestar frente al palacio de Gobierno exigiendo soberanía.
Marcharon todos; estudiantes, maestros y otros actores sociales hasta el Palacio de López, cuando el presidente de turno dio la orden de matar a quema ropa a estudiantes de entre 15 a 18 años de edad.