El proyecto de Ley “Que establece nuevas disposiciones para la exportación de granos en estado natural”, fue presentado por la bancada del Frente Guasu conformada por los senadores Fernando Lugo, Carlos Filizzola, Hugo Richer, Sixto Pereira y Esperanza Martínez.
La polémica propuesta cuenta con dictámenes en contra por parte de las comisiones legislativas del Senado.
“El Frente Guasu dará la última batalla del año este jueves, en el Senado, a la necesidad de una mayor equidad tributaria en el país”, señala una campaña de esa nucleación política.
El proyecto establece que lo recaudado con el tributo sea distribuido en 50 por ciento para la adquisición de tierras para la reforma agraria, 20% para apoyo a la agricultura familiar campesina, 20% para atención primaria a la salud y 10% para obras viales.
Para el Frente Guasu, si los sojeros pagaran impuestos se podría generar unos USD 450 millones. Con esos fondos, señalan que al año se pueden construir y equipar 45 centros de salud o 2.250 aulas, contratar 3.451 docentes, contratar 1.000 médicos y asfaltar 180 kilómetros de rutas rurales.
En el 2013 se sancionó un proyecto similar pero con un impuesto del 10% y se le incluía a la exportación de granos de girasol en estado natural. Esta normativa fue vetada por el Poder Ejecutivo
La posibilidad de gravar la exportación de granos de soja, maíz y trigo, en estado natural, esta vez con una tasa del 15% volvió a abrir un nuevo debate.
El presidente de la cooperativa Colonias Unidas, Agustín Konrad, aclaró que el sector productivo no está de acuerdo en absoluto con el impuesto a la exportación de granos.
Dijo que el sector agroproductivo no está en condiciones de sufrir ningún impuesto en estos momentos porque los números que arroja la producción y comercialización de los granos son categóricos, en el sentido de no favorecer para nada a los agricultores.
