Los senadores decidieron aprobar la expropiación de una parte de las miles de hectáreas que posee el Grupo Favero en el distrito de Ñacunday. La propuesta pasa a la Cámara de Diputados para su análisis.
La iniciativa ya se había presentado en la Cámara Alta el 10 de julio del 2014, pero quedó cajoneado por varios meses. Con los senadores colorados del G15, que se abrieron a conversar, principalmente con la bancada del FG, se reavivó el proyecto.
La propuesta fue planteada por los legisladores Pedro Santa Cruz (PDP), Sixto Pereira, Carlos Filizzola y Fernando Lugo (del FG), Carlos Amarilla (PLRA) y Silvio Ovelar (ANR).
La Comisión de Reforma Agraria y Bienestar Rural del Senado dictaminó por la expropiación. El proyecto generó un amplio debate en el plenario de la Cámara de Senadores.
Al inicio, se intentó postergar su estudio para que otras comisiones legislativas puedan analizar el documento, pero no tuvo el acompañamiento de la mayoría. Los senadores liberales Emilia Alfaro y Fernando Silva Facetti criticaron que un proyecto tan importante sea tratado sobre tablas. Pidieron más tiempo para analizar los documentos.
El senador Hugo Richer recordó que Tranquilino Favero nunca presentó los títulos de su propiedad, a pesar del requerimiento del entonces presidente, Fernando Lugo. También lo acusó de ser uno de los mayores deforestadores del país.
Grupo Favero ocupa más del 60% de Ñacunday
El distrito de Ñacunday tiene una superficie de 85.000 hectáreas, de las cuales, según datos de la Dirección General de los Registros Públicos, el Grupo Favero ocupa 52.942 hectáreas con 3.508 metros cuadrados, es decir, el 62,3 por ciento del municipio, con 18 fincas ubicadas en el lugar conocido como Agrotoro, según consta en el proyecto planteado.
En la zona están las colonias privadas Lomas Valentinas, Toro Cuá, Toro Cua’i e Itaipyte, en una superficie de 6.003 hectáreas, desde el año 1979. También en el lugar están las colonias del Indert, Paranambú, de 8.177 hectáreas; 8 de Diciembre, de 450 ha; Chacoré, de 1.492 ha, y Yacui, con 1.045 hectáreas.
La finca 4.036 tiene varios desprendimientos y en igual situación se encuentran otras fincas, debido a las constantes modificaciones que realiza el Grupo Favero en los Registros Públicos, según se menciona en el proyecto de ley de expropiación.
