En la lucha contra la plantación y el tráfico de la marihuana se evitó la circulación de más de 22 millones de kilos de cannabis, con lo que las organizaciones criminales dejaron de percibir más de 653 millones de dólares como lucro cesante, por no poder comercializar el producto.
El informe también señala la lucha contra el crimen organizado trasnacional con operaciones tendientes a la desarticulación logística y financiera de dichas estructuras, así como la detención de los principales líderes que comandan las actividades ilícitas.