El presidente de la Cámara Paraguaya de la Carne (CPC), Korni Pauls, admitió que la investigación denominada “Carne débil” que afecta a 21 frigoríficos de Brasil, también puede tener un efecto negativo para nuestro país.
El escándalo sobre la adulteración de carne involucra además a la empresa JBS que a su vez tiene tres sedes en Paraguay.
“Es un momento de exigir por ley que todo el ganado sea trazable”, expresó al respecto Pauls en comunicación con Radio Monumental.
En este sentido, explicó que existe el pedido de presentación del proyecto en el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), en tanto que el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) también está al tanto de la propuesta.
Con la trazabilidad se podrá conocer de dónde proviene la carne, cuándo fue producida y envasada. Hasta el momento es opcional y solo Europa lo exige.
Para el empresario, solo depende de una decisión política la aprobación del proyecto que puede hacer el país gane confianza y credibilidad ante los rigurosos controles que se vienen como consecuencia del caso revelado en Brasil.
De acuerdo a las publicaciones de la BBC, los frigoríficos del país vecino usaban sustancias químicas, algunas de ellas cancerígenas para disimular las características físicas de la carne podrida, así como su olor.