Relató que cuando en Colombia en la década de los 80 el narcotraficante Pablo Escobar asesinaba tanto a autoridades, fuerzas del orden como profesionales de prensa, los medios decidieron aunar fuerzas para protegerse y poder seguir denunciando.
“Cuando nos vimos en esa paralización los medios de comunicación, a través de un acuerdo con la asociación de medios de Colombia decidimos comprometernos a publicar todos al mismo tiempo una misma noticia (en prensa escrita y TV)”, sostuvo.
Explicó que dos veces a la semana habían reportajes investigativos sobre las operaciones del narcotráfico (y sus tentáculos políticos) en todos los medios. “Ese fue nuestro antídoto para enfrentar la violencia”, señaló.
Lamentó que “los Estados no se han tomado muy en serio el papel que jugamos, el riesgo que asumimos, el peligro que enfrentamos y por lo tanto creo que no ha habido grandes casos resueltos de responsables de asesinatos de periodistas”. Indicó que “deberían tomar una posición mucho más frontal para tratar de resolver los crímenes contra los periodistas”, agregando que no es un privilegio, sino es un deber ante el peligro que representa la profesión.