Por Liza Paredes
La realización de un seminario taller de mejoramiento administrativo y de gestión en la Secretaría General desnudó la necesidad de crear las direcciones, según el argumento que consta en la resolución Nº 639.
Entre las direcciones creadas figura la de Documentación y Archivo, encargada de ejecutar el apoyo a la tramitación para la preparación de las sesiones. La Dirección de Proceso Legislativo, que tiene a su cargo el registro y control de los documentos ingresados para la elaboración de los asuntos entrados; y la Dirección de Digesto Legislativo que, compilará, depurará y sistematizará la legislación vigente, incorporando nuevas normas legislativas.
innecesarias. Las direcciones más innecesarias por su desempeño son el de Ediciones, encargada de fotocopiar los legajos que contienen los proyectos de leyes a ser incluidos en el orden del día, y el Departamento de Mesa de Entrada, cuya única atribución es la de recepcionar documentos y derivar a las respectivas dependencias.
En la resolución Nº 640, de la misma fecha, los asignados a ocupar los departamentos de Mesa de Entrada y Ediciones adquirieron el rango de director, con un salario de G. 5.476.100 hace seis años. Hoy el salario del director de Fotocopias asciende a la suma de G. 14.652.000.
sorpresa. El presidente del Senado, Blas Llano, en conferencia de prensa dada el miércoles, mostró su asombro por las insólitas direcciones existentes en la Cámara entre ellas el de Fotocopiados. Lo paradójico es que su propio correligionario, Tito Saguier había sido su creador.
La creación de las direcciones son atribuciones exclusivas de los presidentes de las cámaras, puestos que son considerados como cargos de confianza y generalmente ocupados por sus recomendados, quienes gozan de altos privilegios salariales.
Según las declaraciones de algunos funcionarios, quienes prefirieron guardar el anonimato, en el Senado existe una rosca que solo permite que un grupo selecto pueda ocupar las direcciones y los altos cargos, bajo la complicidad de la presidencia que va asumiendo funciones en cada periodo de sesiones. Ahora Llano busca ordenar la casa, enfrentado a una mayoría de funcionarios que temen perder los privilegios.