Las medidas de suspensión se habían impuesto para el frigorífico Concepción hace poco más de un mes y para la industria JBS Paraguay, desde agosto pasado.
El motivo de la suspensión para exportar, según autoridades sanitarias de Rusia, fue la detección de bacterias en productos cárnicos exportados, fuera de los permitido en la zona.
En total unas 18 plantas frigoríficas locales tienen licencias para exportar a Rusia, según el organismo sanitario de la zona. Tras el levantamiento de la medidas de restricción, quedan otros tres frigoríficos con suspensiones temporales, que son frigorífico Neuland, Agrofrío y frigorífico Guaraní. Particularmente, este último frigorífico fue suspendido por las autoridades sanitarias de Rusia porque detectaron la presencia de la bacteria Escherichia coli (que causa intoxicación alimentaria) en un cargamento de 24,6 toneladas de carne paraguaya. “Las pruebas realizadas han mostrado que el producto no cumple las normas de seguridad debido a la presencia de la bacteria E-Coli”, refirió la información, según reportes de la prensa rusa.
Recordemos que Rusia es el principal destino de exportación de la carne vacuna paraguaya. Solo de enero a agosto Paraguay envió carne vacuna por valor de más de USD 200 millones.
En cuanto a las toneladas exportadas en ese mismo periodo fue de 63.490 en el segmento de carne vacuna y menudencias 10.464 toneladas, por valor que supera los USD 16.468.031. Otro de los productos que envía Paraguay a Rusia es carne porcina, el 97% de estos productos cárnicos van a esta zona.
Arnaldo Bavera, director de Calidad e Inocuidad de Productos de Origen Animal del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Animal (Senacsa), comentó que una delegación de técnicos rusos la semana pasada estuvo por Paraguay a fin de verificar las plantas frigoríficas de carne vacuna, que estaban con medidas de suspensión para exportación.
“Las visitas tuvieron un dictamen favorable en general”, lo cual coincide con el levantamiento de las medidas de suspensión de los frigoríficos que fueron verificados por los técnicos rusos.
Por otra parte, en el mes de noviembre llega al país la auditoría de técnicos de la Unión Europea, a fin de verificar los establecimientos ganaderos y las industrias frigoríficas nacionales.
