El representante de Rusia, Vladimir Safronkov, habló ayer en el Consejo de Seguridad para justificar su oposición a un proyecto de resolución que buscaba condenar el ataque registrado en Jan Shijún, Siria. En ese ataque murieron 86 personas y más de 200 resultaron heridas. Organizaciones como Médicos Sin Fronteras (MSF) afirmaron que las víctimas presentaban síntomas parecidos a los de un agente neurotóxico como el gas sarín. Safronkov dijo que no sería serio que el Consejo de Seguridad aprobara una resolución sobre estos hechos sin hacer una investigación objetiva sobre el caso, del que dijo solo existen falsos reportes. Se debe hacer “una investigación completa para averiguar qué pasó y quién fue responsable”, insistió el diplomático. El proyecto de resolución, que finalmente no fue llevado a la sesión matutina del Consejo de Seguridad, estaba defendido por EEUU, Francia y el Reino Unido, y exigía que se investigaran a fondo los hechos. No establecía, sin embargo, quién es responsable de ese ataque, aunque los gobiernos de los 3 países acusaron a Bachar al Asad. efe