Según informa hoy la agencia oficial iraní IRNA, esa fue la petición que el mandatario realizó al director general del organismo con sede en Viena, Yukiya Amano, durante el encuentro que ambos mantuvieron en Teherán, durante una visita diseñada para acelerar la resolución de los asuntos pendientes relacionados con el programa nuclear iraní, incluido el esclarecimiento de posibles dimensiones militares.
“La OIEA debe jugar su papel adecuado, desde un punto de vista técnico y legal sin importarle la visión que los poderes del mundo tengan sobre este asunto, justo cuando las negociaciones con el Grupo 5+1 (Estados Unidos, Rusia, Francia, Reino Unido, China y Alemania) se están aproximando a su fase final”, dijo el presidente.
En ese sentido, el mandatario apuntó que “si existe la voluntad por ambas partes” las “ambigüedades pendientes” entre Irán y el organismo de las Naciones Unidas, tal y como se resolvieron diferencias similares en el pasado.
Así, el presidente señaló que la República Islámica ha mantenido una “larga y transparente cooperación” con la OIEA, y ha probado a sus inspectores que “las falsas acusaciones sobre una desviación de las actividades nucleares (de Irán) son infundadas”.
“Irán, como otros firmantes del Protocolo Adicional de Salvaguardias de la OIEA, debe estar legitimado para usar todos sus derechos, y no debe haber ninguna discriminación al respecto”, afirmó Rohaní.
De este modo, el mandatario apuntó que bajo el paraguas del Protocolo Adicional y las actuales regulaciones, Irán “está dispuesto a llegar a un marco justo para arreglar los temas pendientes” sobre su programa nuclear.
Amano reconoció y agradeció por su parte la cooperación de Irán con la OIEA y dijo que el país siempre cumplió con sus compromisos, al tiempo que añadió que “con mutuo respeto y cooperación próxima” todos los asuntos “pueden ser resueltos”.
Asimismo, mostró su esperanza de que el informe que su agencia publicará cuando culmine su viaje a Teherán, “ayude a la marcha exitosa” de las actuales conversaciones nucleares entre Irán y el 5+1.
La OIEA trata desde hace 12 años de confirmar sin éxito si Irán tiene o tuvo un programa militar nuclear militar clandestino.
Además, también será el responsable de verificar el cumplimiento de cualquier acuerdo al que lleguen Irán y las grandes potencias.
El sistema de inspecciones a que deben someterse las instalaciones nucleares iraníes es uno de los aspectos que impiden que se cierre el pacto nuclear sobre el que se negocia desde hace 20 meses.
Hasta ahora, el principal problema ha sido la exigencia de que los controles incluyas bases militares, algo a lo que Irán se niega al argumentar cuestiones de seguridad nacional.
