Aníbal Rolón, el camarógrafo de Telefuturo que estuvo presente para grabar la entrega de los delincuentes que tenían de rehenes a un matrimonio en Santa Rita, relató que, poco antes de ir a grabar todo lo acontecido y que ya es de público conocimiento, se encontraba con los demás colegas en una vivienda cercana. Allí sufrió el hurto de su aparato celular.
“Estábamos en la casa de un colega entre compañeros cuando me llamaron para entrar a grabar la negociación, por lo que salí rápido de ahí”, cuenta Rolón.
Por la premura del tiempo no se dio cuenta que dejó su celular cargando a través de una notebook. Poco más tarde se percató de que no contaba con su teléfono, pero por el requerimiento del momento, no pudo volver a buscarlo de inmediato.
Al terminar de grabar, regresó a la vivienda y se encontró con la sorpresa de que su celular fue hurtado. “Había en el lugar varios aparatos pero mi celular, un S4 Mini color blanco, no. Le pregunté a los compañeros que estaban ahí y nadie encontró nada”, relata Rolón.
Lo primero que hizo fue llamar a su número, pero la llamada era derivada al buzón de voz, por lo que decidió ir a formular la denuncia y a bloquear el número de teléfono.
Lamentó tener que pasar por una situación como esa, más aún teniendo en cuenta que en el lugar, prácticamente todos los que estaban eran colegas.
“Una pena que se pierda entre los compañeros, en vez de cuidarnos entre nosotros”, lamentó el camarógrafo.
Finalmente, agregó que lo que más siente de esta penosa situación, son los archivos que contenía su aparato celular.
Con relación al trabajo que hizo, expresó en la 1080 AM: “Esta experiencia fue muy jodida, tuve un escalofrío, no sabía lo que iba a pasar”.