Juan José Brull | Pilar
A escasos 2 kilómetros aguas arriba de Pilar, en el lugar conocido como “Laguna Gadea”, pescadores furtivos dispusieron los elementos que según la ley de pesca están prohibidos.
Lo que significa que la actividad pesquera ilegal continúa a pesar de la prohibición. Ante la presencia de la patrulla de la prefectura y la SEAM nadie se responsabilizó del hecho.
Javier Encina, de la oficina regional de pesca de Pilar, refirió que el descubrimiento demuestra el incumplimiento de la ley de pesca.
El funcionario manifestó que las tareas de control continuarán y destacó el apoyo del personal de la Prefectura. Manifestó que en lagunas, riachos y en desembocaduras de los riachos la pesca no se puede realizar.
Apuntando que se pretende con esta legislación preservar los sitios de desove de las especies ícticas y su reproducción.
Comentó que unas 200 especies fueron halladas atrapadas en estas redes, entre sábalos, palometas, armados y bogas. Los peces fueron liberados, y las redes serán incineradas.