“Al salir de acá ya tengo un trabajo con qué mantener a mi familia, me siento a gusto al vender y tener mi propia empresa”, contó el preso mientras recibía pedidos de tal o cual artículo.
Libros, guampas, termos y otros objetos fabricados por ellos mismos y forrados en cuero componen la mesa de exhibición de productos, de fino acabado, que se realiza con el aval de la Corte Suprema de Justicia.
Rodríguez tiene la confianza de las autoridades del penal, es por eso que es el único en ser designado para atender en el stand.
Para mediados de mes ya eran cientos los pedidos de todo tipo de objetos.
La intención es que durante la exposición se llegue a vender más de 100 termos, que es el producto estrella, incluso destronando a la emblemática guampa de Tacumbú.