Al final del partido entre Luqueño y Olimpia, el grueso de la barra organizada Chancholigans se juntaron a 4 cuadras del estadio Feliciano Cáceres y desde allí se enfrentaron con otros hinchas luqueños y franjeados. Tuvieron que intervenir los cascos azules para controlar a los inadaptados. Varios vehículos fueron violentados y sufrieron daños.