El martes pasado se registró un fatal accidente del vuelo 2933 de la aerolínea LAMIA, cerca de Medellín, Colombia.
El siniestro causó la muerte de 71 personas durante un vuelo a Medellín, incluidos miembros del equipo de fútbol brasileño Chapecoense, que se disponían a disputar la final de la Copa Sudamericana. Sin embargo tres jugadores, dos miembros de la tripulación y un periodista sobrevivieron.
¿Qué significa Lamia, el nombre del avión siniestrado? Lamia es el nombre de una criatura femenina de la mitología y el folklore grecolatinos, caracterizado como asusta niños y seductora terrible.
Es representado por la cabeza de una mujer con cuerpo de serpiente; según la leyenda, se alimenta de hombres, jóvenes y también de viajantes.
Se la concibe como un personaje individual, pero también como el nombre genérico de un tipo de monstruo, las lamias, que son monstruos, brujas o espíritus femeninos que atacan a jóvenes o viajeros alimentándose de su sangre.
Según la mitología grecorromana, Lamia era una reina de Libia que mató a sus hijos y fue la pena lo que la transformó en monstruo que devoraba a niños y jóvenes.
Lamia fue condenada a no poder cerrar sus ojos, de modo que estuviera siempre obsesionada con la imagen de sus hijos muertos. Ella sentía envidia de las otras madres y devoraba a sus hijos. Tenía el cuerpo de una serpiente y los pechos y la cabeza de una mujer.
En la Antigüedad, las madres griegas y romanas solían amenazar a sus hijos traviesos con este personaje.
La Lamia mitológica sirvió de modelo para las lamias que eran pequeños monstruos africanos, humanos de la cintura para arriba, que atraían a los viajeros con su agradable siseo y enseñando sus senos, para después matarlos y devorar sus cuerpos.
Posteriormente, las lamias aparecieron a menudo en los bestiarios como ejemplo de monstruo despiadado y salvaje.