El ingeniero Guillermo Parra, vocero del gremio Dicapar, que nuclea a varias distribuidoras y emblemas, señaló que lo primero que dejaron en claro en esta reunión es que les hubiese gustado haber sido convocados primero para dictar el citado decreto, a fin de que se adecúe realmente a las necesidades del Gobierno y las necesidades operativas del sector privado.
“También manifestamos que el control del registro de importación de stock y venta del GLP, que el MIC quiere lograr con este decreto, se pueda hacer sin la necesidad de una licencia previa de importación”, enfatizó.
Aseveró que la licencia más bien generará efectos adversos como el encarecimiento del producto y posibles dificultades para el abastecimiento.
Parra dijo que la gente del MIC les confesó que ellos no participaron en la elaboración del decreto, hecho que consideran grave. Estimó que, a futuro, la normativa deba ser modificada porque “así como está es de cumplimiento imposible”.
BENEFICIO. Por su parte, el ingeniero Carlos Servín, titular de la Dirección de Combustibles, dijo que esta es la primera de la serie de reuniones que tendrán con el sector privado para reglamentar el decreto.
Consideró justa la preocupación por el posible entorpecimiento de la provisión que se pueda generar con los controles y la licencia previa.
No obstante, apuntó que más bien el consumidor se verá beneficiado con la calidad al haber un mejor control en el sector con el decreto.