El vicepresidente del gremio industrial, Luis Tavella, especificó que la gran diferencia existente entre el proyecto oficial y el del sector privado es que el primero nombra un superintendente, un presidente del órgano rector de los fondos y que prácticamente desaparecerá el consejo, que es donde deberían estar representantes de los empresarios, los trabajadores y los jubilados, quienes son los dueños genuinos del dinero.
Bernardo Rojas, de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT-A), dijo a su turno que su sector busca un consenso en los proyectos para que la administración de los fondos sea en forma tripartita: empresarios, trabajadores y Gobierno.
“Hay que cuidar los fondos previsionales; sostenemos que el IPS es de los trabajadores y empresarios, queremos mantener esa filosofía del reparto y la solidaridad”, explicó.
Eduardo Felippo, titular de la UIP, reclamó por su parte que en el proyecto del Ejecutivo se deje sin participación al sector privado de la administración de los fondos. “Creemos que el Estado debe controlar, para eso están la Constitución Nacional y las leyes, pero otra cosa es el uso indiscriminado que pueda generarse tal como está en el proyecto oficial”, dijo.
A su criterio, solo hay una participación teórica del sector privado con el proyecto que prevé reunión del consejo cada seis meses.
También Carlos Díaz Valiente, presidente de la Asociación de Jubilados del Banco Central del Paraguay, expresó que en lo referente a gobernanza e inversiones no están de acuerdo con el proyecto del Ejecutivo.