“Haciendo un análisis práctico, el docente a lo largo de los años, físicamente tiene permanencia; es decir, está siempre enseñando, va conociendo diferentes procedimientos de la universidad y las actividades. Tiene una vida dentro de la comunidad universitaria mucho más extensa”, expresó sobre los criterios que sustentan la mayoría docente.
En contrapartida, un estudiante tiene una vida más corta, según el director. “Entra, cursa los estudios y, cuanto más eficiente sea, en cuatro años puede terminar ya su carrera”, dijo. Esto significa que termina lo suyo y se va.
“Ese factor es el que se tiene en cuenta para dar predominancia a la opinión de los docentes en los órganos de decisión. Además, para ser consejero docente se debe pasar por un concurso de méritos y aptitudes. Es decir, una persona que pasó por ciertos exámenes ejerce la docencia y conoce por tanto la universidad”, sostuvo.