LO VIABLE … DENTRO DE LO POSIBLE. En este contexto, lo presentado al Congreso Nacional por Hacienda es un ejemplo paradigmático de lo que se puede cambiar sin alterar los intereses hegemónicos de las estructuras de poder ni de los estratos dominantes y sin contar con mayorías políticas y legislativas necesarias para tales cambios. En otras palabras, el proyecto de ley de Presupuesto General de la Nación (PGN) para 2017 muestra en el papel y en los propósitos lo que puede ser hecho dentro de las mencionadas coordenadas.
ÉNFASIS EN LO SOCIAL, FINANCIÁNDOLO CON MÁS DEUDAS. He aquí solo algunas fundamentales variables económicas, financieras y sociales expuestas en el mismo, expresadas en USD y en cifras redondeadas:
• El PGN 2017, unos USD 12.574 millones, representa el 41% del producto interno bruto (PIB), unos 30,7 millardos de dólares en ese año.
• El aumento del PGN 2017 sobre el de 2016 es de 4,1%. En comparación, el Índice de Precios al Consumidor del Banco Central para 2016 es estimado en 4,5%. Es decir, en términos de poder adquisitivo, las partidas presupuestarias de uno y otro año permanecerán más o menos iguales.
• Los saldos rojos en el PGN estarán en torno al límite superior establecido por la Ley de Responsabilidad Fiscal, consistente en 1,5% del PIB, hoy en día unos USD 450 millones de déficit legal tope.
• USD 600 millones en bonos del Tesoro serán emitidos en 2017, según el PGN, de los cuales alrededor del 30% están previstos para financiar obras. El resto estará destinado para atender los compromisos financieros internacionales provenientes del endeudamiento. Hasta el momento ya se colocaron unos USD 2.380 millones en bonos. Preocupante no es el nivel del endeudamiento, en términos absolutos, sino el coeficiente financiero que resulta de comparar la proporción de la recaudación tributaria que cada año se está destinando al pago del mismo.
• La inversión social representa el 57% del total de gastos de la Administración Central. Unos 190.000 adultos mayores en situación de pobreza recibirán pensión. Unas 150.000 familias en dicha situación serán atendidas por el programa Tekoporã, con ampliación de cobertura en 70% de las transferencias monetarias condicionadas. 12.000 niños y adolescentes realizando trabajo infantil serán protegidos. Se entregará alimento escolar para unos 895.000 alumnos.
• Se construirán unas 9.720 viviendas a través de Senavitat. Se proyecta la instalación de otras 40 unidades de salud más para la atención de unas 2.696.000 personas. La asistencia a la agricultura familiar beneficiará a unas 104.000 familias. Se adquirirán 11.000 hectáreas para asentamientos campesinos y 2.860 hectáreas para comunidades indígenas.