“Lo que yo diga hoy sonará ridículo y lo que ustedes digan será verdad”, decía anoche en el inicio de la conferencia de prensa el entrenador de Cerro Porteño, César Farías, tras la derrota 1-2 ante Rubio Ñu, lo que representó la segunda caída en la era del venezolano.
Y nada de lo que dijo anoche el entrenador convence al directivo, al aficionado, a nadie, pues Cerro no camina, no muestra cuál es el rumbo que tendrá de la mano del adiestrador, que hasta ahora solo ha sido oratoria, pero no ha tenido efectividad en el campo de juego. El equipo... nada.
En el partido fue Luis Leal el que levantó de sus sillas al aficionado azulgrana, con un golazo a los 71', pero ese tanto no levantó al equipo, que antes ya se veía superado por Rubio Ñu, que replicó rápido, (74') a través de Iván Ramírez y que liquidó el expediente a los 91', gol de Fabio Escobar.