CIUDAD DEL ESTE
Un grupo de padres de familia se manifestaron frente al Centro Regional de Educación (Crece) reclamando por cobros irregulares en el nivel inicial y el primer ciclo de la institución. El principal blanco de las acusaciones es la directora general, Antoliana Lezcano, quien dijo a su vez que el plan de mejoras en la institución molesta el negocio de algunos docentes.
Los padres estuvieron desde temprano frente a la institución y dos mujeres, Mirian Arévalos y Celia Giménez, se encadenaron exigiendo la salida de la directora y la intervención del Crece por parte del MEC. La madre acusó a la directora de autoritaria. “Todo se paga del bolsillo de los padres en esta institución, nosotros arreglamos la sala de clases, compramos agua y ahora la directora nos pide informes de nuestros gastos, nosotros no le debemos a ella, sino a los padres que aportaron”, arremetió Arévalos.
Los carteles y pasacalles colocados en el acceso a la institución educativa indicaban el pedido de cárcel inclusive para la directora y la salida de los principales referentes de la Asociación de Padres del Centro Regional de Educación.
MATRÍCULA IRREGULAR. De acuerdo a las explicaciones de la directora Lezcano, el reclamo de los padres de familia es por un reiterado pedido de informes solicitado a escolar básica, primer y segundo ciclos y nivel inicial, que justificó diciendo que en las aulas hay profesores que cobraron matrícula en forma irregular para incluir a alumnos en clases, sin que estén en la lista oficial. Eso se denunció en marzo, hubo intervención del equipo jurídico del MEC, pero los docentes siguen ejerciendo actividades en aula.
“Hicimos el control y solamente en el jardín encontramos que había 16 alumnos que no estaban en la nómina oficial, con la intervención del MEC se resolvió matricular a todos y se designó profesores auxiliares porque la cantidad de alumnos por aula sobrepasaba la cantidad establecida”, explicó la directora.
Lezcano explicó además que se optó por la presencia de estos profesores, como excepción, ya que al conocerse la irregularidad, los niños ya contaban con uniformes y útiles y estaban participando de todas las actividades curriculares.
“Este mes pedí informes sobre los auxiliares, los pagos, el grado académico de cada uno, el contrato y todos los detalles porque yo como directora debo conocer esos datos, pero no me quisieron dar. Eso es lo que ahora reclaman y motivados por sus directores se están manifestando”, reveló Antoliana Lezcano.