AFP, REUTERS y EFE
BRASILIA - BRASIL
La Policía brasileña realizó ayer una gigantesca operación en el marco de una investigación por fraudes contra los principales fondos de pensión del país, durante la cual fueron bloqueados 8.000 millones de reales (USD 2.460 millones).
La acción, que movilizó a 560 efectivos, “se basa en 10 casos revelados al examinar las razones de los déficits multimillonarios presentados por los fondos de pensión. De los 10 casos, 8 están vinculados a inversiones realizadas de forma temeraria o fraudulenta”, señaló la fuerza. Los investigados deberán responder a sospechas de “gestión temeraria o fraudulenta y otros delitos contra el sistema financiero”, agregó.
orden de detención. Un juzgado de Brasilia ordenó la detención temporaria de 7 personas y la instrucción de 106 mandatos de búsqueda y aprehensión de documentos y 34 de conducción coercitiva de personas para declarar ante las autoridades. Fueron incautados o bloqueados 90 inmuebles, 139 automóviles, una aeronave y valores en cuentas bancarias, así como acciones y títulos pertenecientes a 103 personas y empresas, detalló por su parte la CVM (Comisión de Valores Mobiliarios) que fiscaliza el mercado bursátil brasileño. Las pesquisas se realizaron en Brasilia, Sao Paulo, Río de Janeiro, Espírito Santo, Río Grande do Sul, Paraná, Santa Catarina y Amazonas. El caso busca desentrañar la forma en que fueron administrados los fondos de seguridad social de empleados de entidades públicas como Funcef (del banco Caixa Económica Federal), Petros (de la petrolera Petrobras), Previ (del Banco do Brasil) y Postalis (del correo).
El grueso de la investigación indaga operaciones en los llamados FIPs (Fondos de Inversión en Participaciones), que son esquemas cerrados de adquisición de acciones, bonos y derivados, limitados a inversores calificados como instituciones financieras o aseguradoras. La Policía dijo haber identificado la actuación de empresarios, funcionarios de fondos estatales, de firmas encargadas de avalar activos y de gestores de FIPs. En los últimos 2 años fueron revelados numerosos escándalos de corrupción en el Estado, encabezados por la Operación Lava Jato, que reveló una monumental red de desvíos de dinero público hacia partidos políticos.