Florentín estaba con orden de prisión domiciliaria cumpliendo en la Agrupación de Seguridad (con sede en la Comandancia) por un hecho de violencia intrafamiliar.
Los investigados son los que en ese momento tenían el cargo dentro de la Agrupación de Seguridad, como el jefe comisario Julio Melgarejo, el subjefe comisario Ramón Escobar, el ayudante oficial Mario Romero, y el jefe de la Compañía Antimotines oficial Oscar Ortiz.
Sumarian también a los que tenían cargos en la Comandancia, como el jefe comisario Aldo Recalde, la jefa de Servicio Oficial Noelia Garrigoza, el jefe de Cuartel Carlos Giménez, el oficial de guardia Henrique Benítez, las adjuntas de guardia suboficial María Liliana Lugo y Regina Espínola, y el armero de guardia suboficial Francisco Aguilar.