29 mar. 2024

Polémica: Los artistas y las “narcofiestas”

La foto de la cantante Nadia Portillo y la ex modelo Zuni Castiñeira con el presunto narco Gringo González evoca otros casos de artistas internacionales, a quienes se acusa de haber actuado para criminales. Frank Sinatra, el Puma Rodríguez y Chespirito, entre otros involucrados.

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Artistas como Chespirito, Marco Antonio Solís, José Luis Rodríguez y Frank Sinatra fueron señalados por actuar en fiestas organizadas por narcotraficantes. | Imagen: Ylda Rodríguez

En la serie televisiva “Pablo Escobar, el patrón del mal”, hay una escena muy festejada, en la que el gran capo del Cartel de Medellín organiza una fiesta privada en su hacienda, donde contrata a un popular cantante de moda, al que se bautiza como “El Pantera”, y a quien la mayoría de los espectadores identifican como una recreación del conocido ídolo José Luis “El Puma” Rodríguez.

El cantante le dedica una canción romántica a la esposa de Pablo Escobar Gaviria, lo cual provoca los celos del capo mafioso, quien ordena a sus hombres que le paguen sus honorarios al artista y lo suban a patadas a la avioneta que lo había traído.

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Aunque los representantes de El Puma Rodríguez –quien próximamente actuará en Asunción-, niegan que el artista haya realizado actuaciones privadas para el jefe narco, el episodio forma parte de la leyenda internacional, con una larga lista de artistas que habrían animado fiestas para los capos criminales, entre los que ahora se suma la conocida cantante paraguaya de ritmo tropical Nadia Portillo, quien hasta hace poco se presentaba como La Kchorra.

Nadia Portillo asegura que fue a cantar a “un cumpleaños”, en “algún lugar del interior del país”, donde la ex modelo Zuni Castiñeira ya estaba como invitada, y le pidieron salir en la foto, con la persona a quien no conocía, y quien hoy es uno de los capos más buscados, acusado de haber robado los 252 kilos de cocaína de la Jefatura de Policía del Amambay.

Los conocedores del mundo del narcotráfico sostienen, sin embargo, que la fiesta en la que se tomó la foto no pudo haber sido “un cumpleaños cualquiera”, ya que Gringo casi no hacía vida pública y sólo acudía a fiestas muy privadas de otros capos, con un gran dispositivo de seguridad de guardias y capangas armados.

Casos de artistas famosos en el mundo de la mafia

Uno de los más grandes cantantes del mundo, el norteamericano Frank Sinatra, conocido popularmente como “La voz”, también arrastra la leyenda de haber sido apadrinado por la mafia neoyorkina y de haber animado varias de sus grandes fiestas privadas.

Los testimonios apuntan a que Sinatra cantó en la boda de la hija del capo Willie Moretti, situación que el cineasta Francis Ford Coppola recrea en su célebre película “El Padrino”, con el personaje del cantante Johnny Fontane, cantando en la boda de la hija del capo Vito Corleone, a quien luego pide ayuda para ser estrella de una película.

En países de América Latina se han dado muchos otros casos. Fernando Rodriguez, hijo de otro de los grandes capos del Cartel de Medellín, Gilberto Rodríguez Orejuela, aseguró que los artistas mexicanos Juan Gabriel y Vicente Fernández actuaron varias veces en las grandes fiestas que daba su padre en Colombia.

El cantautor Marco Antonio Solís, quien también fue acusado de actuar en las “narcofiestas”, dijo más de una vez que sus contratos son arreglados por terceras personas, y que muchas veces no sabe para quiénes va a actuar. “Mi trabajo es solo actuar y cantar, no hay nada malo en eso”, declaró.

El diario guatemalteco Prensa Libre publicó que Vicente Fernández, Marco Antonio Solís y el grupo K-Paz de la Sierra actuaron en fiestas de los capos guatemaltecos, entre ellos los Lorenzana, los Mendoza y los Berganza, “quienes no dudan en pagar entre 100 mil y 200 mil dólares para poner el toque musical en bodas y cumpleaños al estilo de sus compadres mexicanos”.

La cantante Paquita la del barrio, conocida por canciones como “Rata de dos patas” y "¿Me estás oyendo, inútil?”, reconoció por su parte: “Ya he trabajado para narcotraficantes. Uno no se da cuenta hasta que llega a la fiesta”.

El gran cómico mexicano Roberto Gómez Bolaños, popularmente conocido como Chespirito, recientemente fallecido, también estuvo en el centro de las polémicas cuando fue acusado por su propio ex compañero de la serie televisiva El Chavo del 8, Carlos “Kiko” Villlagrán, de haber realizado actuaciones privadas para el capo mayor de Colombia, Pablo Escobar Gaviria, algo que Chespirito siempre intentó negar.

La detención de un cantante en una fiesta de narcos

Uno de los casos más sonados se dio el 11 de diciembre de 2009, en México, cuando el popular cantor de rancheras, Ramón Ayala y sus músicos fueron sorprendidos junto con otros artistas, tocando en una “narcoposada” en Tepoztlán, Morelos, en una fiesta organizada por el Cártel Beltrán Leyva. La Procuradoría General ordenó el arresto de los músicos por “tener un supuesto vínculo con el narcotráfico”, pero unos días después Ayala fue absuelto al no encontrarse pruebas suficientes. El artista dijo que desconocía para quien iba a tocar.

El cantante venezolano Oscar D’León ha confesado en un libro autobiográfico que también cantó para narcotraficantes. “He estado en fiestas de esa gente, pero no fui pensando en el narcótico, fui pensando en mi arte, y lo pagan y ya”, dijo.

Aunque todos sostienen que “ir a cantar en una fiesta no es ser cómplice del narcotráfico”, varios dirigentes de asociaciones de víctimas sostienen que la participación de estos artistas ayuda a blanquear y a darle más poder a los criminales en una sociedad, y que “al aceptar el dinero sucio de sangre, estos artistas también se están manchando”.

Hay artistas dignos que se sabe no aceptan dinero vinculado con temas de narcotráfico, como lo hizo en estos días el famoso “Rey” de la canción brasileña, Roberto Carlos, quien se negó a que el director de cine Jose Padilha (Robocop y Tropa de Elite), use sus canciones en la serie “Narcos”, inspirada en la vida del narcotraficante colombiano Pablo Escobar, que prepara para la plataforma de contenidos digitales Netflix.

“No quiero asociar mi trabajo con una persona que no es del bien”, fue la respuesta de Roberto Carlos a Padilha. Un ejemplo a tener en cuenta.

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