El anteproyecto de norma comunal planteado por el edil fue derivado a las comisiones de Tránsito y de Personas con Discapacidad para su estudio.
El mismo sugiere la concreción de una tarjeta que permita a la gente comprendida en esta franja de la población a utilizar esos espacios de aparcamiento, de manera gratuita, los cuales incluso tendrán señalización en sistema braille, destinado a invidentes (ver infografía).
Aclara que la Dirección de Tránsito deberá establecer con sus técnicos los sitios a ser otorgados dentro de una distancia máxima de 100 metros cada uno, incluyendo aquellos sectores de la ciudad donde se abona por el servicio.
Para casos excepcionales señala que se incluirá a aquellos que hubieran sufrido una lesión o condición que les impida su libre movilidad en forma temporal, lo cual les habilitará a usar esos estacionamientos, con una tarjeta que será tramitada en la Comuna capitalina y tendrá validez de seis meses. Para ello tendrán que presentar constancia otorgada por la Senadis.
También los vehículos de transporte público, taxis, remises especialmente adaptados para trasladar a personas con discapacidad, deberán ser debidamente acreditados por la institución municipal.
