Consideró que es atribución constitucional del Congreso Nacional la decisión de aprobar una ley especial como la del Presupuesto General de Gastos y no puede estar supeditada al antojo de si le gusta o no al presidente de turno.
“Si aceptamos esto (el veto) cada vez que a un presidente no le guste, podemos seguir hasta el 2038 con el mismo presupuesto; por eso, planteo derogar el artículo de la ley de Administración Financiera para quitar el veto del Ejecutivo”, aseveró.
Recordó que el Gobierno tiene la posibilidad de hacer ajustes o pedir ampliaciones en caso de que existan necesidades puntuales.
“Acá hay como 70 proyectos de ampliación que se les tuvo que dar al Ejecutivo para salvar el veto que ellos mismos hicieron. Esto nos mete en un desorden institucional y le va a complicar la vida tanto al interino que vaya hasta agosto, como al gobierno nuevo que asuma”, opinó.
Al ser consultado sobre los polémicos recortes que hizo el Parlamento el año pasado a la emisión de bonos y la limitación del gasto en política monetaria al Banco Central, respondió que incluso propuso un veto parcial para salvar este pedido.
“Pero acá tomaron esto como algo político, el ex ministro Santiago Peña se enorgullece del veto, eso lo único que demuestra es que tiene mala fe”, disparó el senador.