De este modo, se inclinó porque el futuro presidente no sea alguien que dispute en los frentes del coloradismo ya sea por el oficialismo como de la disidencia.
Lo mismo dijo del ala de los liberales, donde están enfrascados en fuerte interna tanto efrainistas como llanistas.
“Creo que va ser preciso para que se logre gobernabilidad alguien que no esté metido en los procesos electorales que se avecinan y que creo que va ser el tema fundamental hasta abril del año que viene”, manifestó.
Optó porque presida el Senado una persona que sea mesurada y no constituye un motivo de crispación política.
“Debe ser una persona que no esté en la pelea por la Presidencia de la República”, clarificó el senador colorado.
Anunció que él está en la campaña de fortalecer su proyecto en Central y Capital y descartó de plano su apoyo al candidato cartista a la presidencia de la República, Santiago Peña porque “no es lo más conveniente para la ANR”, según apuntó.