EFE
La restauración de la iglesia, ubicada a unos 48 kilómetros de Asunción y construida entre 1755 y 1772, se había iniciado con el objetivo de salvarla definitivamente de la acción de los xilófagos, que estaban destruyendo su peculiar estructura de madera y muchas de las piezas de arte religioso que guarda.
Los trabajos de restauración fueron adjudicados en enero de 2015 a la firma C&C por un monto de G. 12.000 millones (unos dos millones de dólares) y estaba previsto que duraran alrededor de 18 meses.
Sin embargo, la empresa fue excluida de los trabajos en octubre, después de que la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas comprobara que el consorcio adjudicatario había presentado documentos de contenido falso en la licitación pública en la que concursó.
La comisión denunció en un comunicado que la paralización de las tareas de restauración ha deteriorado aún más las estructuras del templo, dado que los trabajos han quedado a medio terminar.
Por ejemplo, el techo de madera policromada de la sacristía, que fue desmontado el pasado mes de abril, acumula meses amontonado en un depósito de la iglesia.
La empresa dejó cerrada bajo llave la sacristía, lo que impide la ventilación y puede provocar aún más daños a causa de la humedad y la presencia de murciélagos o termitas.
Por ello, la comisión instó al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) a que convoque una nueva licitación para continuar con la restauración antes de que la iglesia se siga deteriorando.
La puesta en valor de la iglesia incluye el cambio de maderamen, la restauración de la policromía de madera y la mejora de pilares, techado y revoque de paredes.
También contempla la restauración de la balaustrada del comulgatorio, de la sacristía del altar mayor, del púlpito y de los altares laterales y colaterales.
La obra se completará con el desmonte de 250 metros cuadrados del techo, la actualización del sistema eléctrico y sanitario y el cambio de pisos.
En el templo, cuyo arquitecto original permanece en el anonimato, sobresalen las obras del artista portugués José de Souza Cavadas, autor de los retablos del altar mayor y la sacristía, los confesionarios, el púlpito y varias imágenes religiosas.
