Pese a que hay un aumento de ventas, las diferencias cambiarias con el real y el peso argentino, el incremento del ingreso de mercaderías de contrabando y el sobreendeudamiento de las personas, que salieron de compras desde el 2010, hicieron que el crecimiento de 4% a junio haya sido menor de lo que se esperaba –afectando fuertemente a zonas fronterizas– coincidieron tanto analistas del sector privado como del público.
El economista César Barreto, de Desarrollo en Democracia (Dende), recordó que la diferencia de paridad cambiaria que hay entre el dólar oficial y el blue en Argentina hace que gran parte de los productos de la canasta familiar sean más baratos en ciudades como Clorinda que en los supermercados o grandes tiendas, lo que genera una actividad de contrabando hormiga, “que entre marzo y junio fue muy masivo e incluso los consumidores finales fueron a proveerse de estos lugares, provocando una caída en las ventas en los comercios locales”.
Además, refirió que el menor crecimiento de la economía brasileña combinado con la depreciación del real y los estrictos controles de frontera “han impactado fuertemente en el comercio fronterizo de reexportación, provocando que prácticamente hayan desaparecido los sacoleiros y una reducción en las ventas de los comerciantes de frontera”.
deuda. Otro factor que apunta la economista Gloria Ayala Person es el sobreendeudamiento de ciertas personas, motivado por estrategias comerciales que también inciden, desde el lado de la demanda. Ocurre que algunas promociones de financiamiento de compras –como tarjetas de crédito o préstamos de consumo– de ferias de descuentos del año pasado aún continúan pagándose en 2013, recordó.
sectores. Pese a que existen sectores golpeados en sus ventas este año, no se puede decir que el comercio local no se ha expandido, señaló el presidente interino del Banco Central del Paraguay (BCP), Roland Holst. Apuntó –en una estimación conservadora– de que las ventas crecieron.
“Si uno mira la suma de todos los sectores, el incremento de las ventas está ahí. La pregunta está dónde uno mira; por ejemplo, la construcción en junio bajó 4% pero en mayo había subido 40%. Cuando mirás un sector específico algunos tienen disminución de ventas temporalmente, pero no en la suma. Entonces, si querés mirar si crece el consumo en el país, la respuesta es sí. Pero hay sectores afectados”, comentó.
Agregó que hay rubros que no se ven afectados por la diferencia cambiaria y que muestran tasas de expansión muy positivas en el año.