En la audiencia, juraron los peritos Olga González, Fani Corrales y Francisco Molinas Koi, que representan a la defensa de los dos médicos. Pero los peritos de la Fiscalía, Carlos Garrigoza, Silvio Chirife y Rafaela Fernández, se inhibieron por amistad con los médicos y por trabajar en el Instituto de Previsión Social (IPS).
Con ello, la Fiscalía fue intimada por los jueces Héctor Capurro, Cynthia Lovera y Juan Carlos Zárate, para que en un plazo de 48 horas, presenten nuevos peritos.
No obstante, los abogados querellantes Raquel Mendieta y Rolando Regis temen que se queden sin peritos, ya que los médicos no quieren integrar la Junta Médica contra sus colegas.
Con ello, la audiencia quedó para el próximo viernes, cuando vence el plazo para presentar los peritos.
TESTIGOS. Ayer, también declaró Flavia Orué, la mujer que acompañó a Amelia Rodríguez de Ibarra, madre del bebé, hasta el IPS.
Además, prestó testifical el médico tratante Rubén Darío Méndez, quien señaló que el bebé que luego falleció, Pablo Ibarra, estaba en perfectas condiciones, según los estudios previos.
Refirió que no le dijo a la madre que se hiciera una cesárea, pero que el bebé era muy grande, que la madre tenía sobrepeso y síntomas comunes para la eclampsia.
Por su parte, también depuso María Magdalena Romero, la enfermera que recibió al bebé luego de que llegara de la sala de partos.
Alegó que el niño fue traído por una doctora. Explicó que estaba cianótico (todo azul), además de hipotónico, flácido, sin esfuerzo respiratorio, con la cara azul, según las palabras que usó.
El viernes deberán declarar otros dos testigos, y también presentarse los dos peritos. Hasta ahora, no declararon los médicos acusados por presunto homicidio culposo.
