En una entrevista con la cadena Radio Fórmula, el mandatario reconoció que la respuesta del magnate estadounidense de aceptar el diálogo y viajar a México fue “sorpresiva”.
“Quizá nos apresuramos, quizá nos faltó ponderar la reacción social que se iba a presentar en México”, dijo Peña Nieto, si bien destacó que fue una decisión “correcta” y que no se arrepiente de haberlo hecho así.
“Me sostengo en la necesidad de construir diálogo y de tender puentes de entendimiento ante lo que señala el candidato”, dijo, y añadió que no era “de esperarse que en un primer acercamiento Trump fuera a cambiar diametralmente” sus posiciones respecto a México.
El encuentro, celebrado el 31 de agosto pasado en la residencia presidencial de Los Pinos, desató una gran indignación entre los mexicanos, que se sintieron traicionados y avergonzados por su mandatario.
En su carrera hacia la Casa Blanca, Trump ha tildado de “criminales” y “violadores” a los inmigrantes mexicanos en Estados Unidos, prometido construir un muro a lo largo de toda la frontera común, algo que reiteró en Los Pinos, y amenazado con cancelar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Sobre la depreciación del peso, que esta semana superó la barrera sicológica de las 20 unidades por dólar en bancos, Peña Nieto señaló hoy que se debe a factores externos.
En primer lugar, apuntó, la incertidumbre en torno al resultado de las elecciones presidenciales en EE.UU. y “el posicionamiento que particularmente el candidato Trump ha tenido sobre México”.
En segundo, dijo, la caída del precio del petróleo en los mercados internacionales y su impacto en la economía del país, y en tercero la expectativa previa al anuncio de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) en torno al aumento o no de las tasa de interés.
La Fed anunció hoy su decisión de mantener sin cambios los tipos de interés en el rango actual de entre 0,25 % y 0,50 % con el argumento de que aún necesita más “evidencia” del progreso hacia sus metas para elevar el precio del dinero.
Peña Nieto confió en que el Banco de México, que es el responsable de tomar las medidas de política monetaria, actúe “de manera muy firme” para “contener el que haya especulación mayor sobre nuestra moneda”.
