Se trata de Ricardo Osmar Esquivel Silvero (33), quien fue acusado de robar un celular a una mujer amenazándola con un puñal. La mujer quedó llorando en su lugar y los testigos que presenciaron el asalto decidieron hacer justicia por mano propia y persiguieron al presunto ladrón, que huyó raudamente del lugar a pie. Sin embargo, los justicieros fueron más rápidos y lograron atrapar al hombre en plena calle.
El grupo tomó a Esquivel Silvero, quien fue sometido a una golpiza; tanto, que su rostro quedó ensangrentado y con varios hematomas. Los mismos hombres que lo agarraron lo llevaron hasta la sede de la Comisaría 2ª Central, donde deberá permanecer a disposición del Ministerio Público.
El detenido pasó varios años de su vida en la cárcel de Tacumbú y cuenta con antecedentes penales por robo en 1999 y hurto grave en el 2000, según marcan los antecedentes. De su poder se incautaron un cuchillo de 30 centímetros, así como el teléfono celular robado.