En total fueron once los detenidos en la operación contra el terrorismo yihadista llevada a cabo en Cataluña, España. Se trata de 4 ciudadanos españoles, 5 marroquíes y un paraguayo convertido al islam.
Ramón Espadaler mencionó que se trataba de una célula “operativa, con voluntad contrastada de atentar en Cataluña”, que se dedicaba también a captar a jóvenes islamistas para radicalizarlos en el yihadismo, y enviarlos a combatir con el Estado Islámico en Siria e Irak.
No obstante, aclaró que no se trataba de una amenaza genérica porque el grupo ya fue detectado con anterioridad y hace trece meses estaba siendocontrolado por la Policía local, informó la agencia internacional de noticias EFE.
Destacó el exitoso operativo porque de esa forma se evitará la radicalización de más jóvenes en la zona metropolitana de Barcelona, la capital de Cataluña.
La célula, que se da por desarticulada, es la responsable de haber enviado en diciembre pasado a combatir a Siria a tres jóvenes, que fueron detenidos cuando se encontraban en Bulgaria, de camino hacia Siria, vía Turquía.
Espadaler explicó que otra persona vinculada a esta célula se encuentra actualmente luchando en Irak, incorporada en las filas de Estado Islámico (EI).
Según el responsable del gobierno catalán, la voluntad de la célula de atentar en Cataluña se acreditó durante la investigación. Ya hacía meses que la organización estaba siendo vigilada por la Policía.
Ocho de los detenidos, todos ellos hombres, están acusados de pertenencia a organización criminal con finalidades terroristas, captación y adoctrinamiento de otras personas para ser enviadas a luchar a zonas de conflicto o para incorporarse a la célula desarticulada.
Los otros tres arrestados, entre los que figura una mujer, están acusados de incitación al delito de terrorismo, colaboración con organización criminal con finalidades terroristas y encubrimiento.