En ese sentido, se realizó una reunión en la ciudad de Buenos Aires organizada por la Dirección de Asuntos Técnicos de Fronteras del Ministerio del Interior y Transporte del vecino país.
El principal punto del encuentro giró en torno a la necesidad de realizar un estricto control de entrada y salida de personas del país, tanto antes como durante y después de la visita del Papa.
El representante paraguayo René González, director de Admisión de Extranjeros y Radicados de la Dirección General de Migraciones, explicó los trabajos de logística, operativos y estrategias que la institución pretende desarrollar en los puntos fronterizos.
Los principales pasos internacionales serían Clorinda-Puerto Falcón, Puerto Pilcomayo-Puerto Itá Enramada y Posadas-Encarnación.
Las autoridades argentinas estiman que los visitantes superarán el millón de personas, aunque es difícil de precisar a estas alturas cuál será la convocatoria y la cantidad que cruzará la frontera, señalan.