La veda pesquera se inició el 7 de noviembre y se extiende hasta el 21 de diciembre, con la prohibición de comercializar productos de extracción, pero no los que provengan de estanques de cría.
Entre los principales sitios de donde se puede realizar la compra directa de los productores se encuentran: Areguá en la zona Central; Eusebio Ayala en Cordillera; Nueva Alborada en Itapúa; Juan E. Estigarribia e Yhú en Caaguazú; Quiindy y Acahay en Paraguarí; Itacurubí del Rosario en San Pedro; Dr. Juan León Mallorquín y Hernandarias en Alto Paraná. En tanto que en la capital se pueden adquirir de las pescaderías habilitadas.
Beneficios. La doctora Susana Barúa, directora de Acuicultura del Viceministerio de Ganadería, explicó que la producción piscícola, además de ser sustentable en términos ecológicos, beneficia a poblaciones de peces que se encuentren en peligro de extinción o reducidas por situaciones de impactos naturales o artificiales, incrementa la productividad de cuerpos de agua existentes como lagunas, tajamares y ayuda a disminuir la presión de pesca sobre ejemplares de ciclo biológico largo y de alto valor económico.
Barúa agregó que en el aspecto social se utiliza en los centros de rehabilitación como una actividad de terapia ocupacional; también ofrece oportunidad de recreación y fomenta el turismo y sobre todo permite mejorar los hábitos alimenticios.
