Por Diego Barreto
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La concertación Frente Guasu (FG), encabezada por su presidenta Esperanza Martínez, considera que los últimos ataques de parte del Gobierno y el entorno del presidente Horacio Cartes se deben a que los consideran como la “verdadera oposición” y sienten como amenaza el crecimiento del sector. Martínez apuntó que están decididos a llevar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos varios hechos, entre los que destaca el hecho de que se los haya tildado como el brazo político del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Igualmente no ve chances de que el FG se alíe al PLRA, dado que se teme que este sector sea uno de los que impugnen la candidatura de Fernando Lugo para las presidenciales del 2018. Los colorados también plantearían una acción.
–¿Van a judicializar ante estrados internacionales las acusaciones de referentes del Gobierno?
–Ya pedimos en primera instancia al fiscal general, Javier Díaz Verón, que les haga comparecer a estas personas en la causa que están investigando. Denunciamos las causas que nos endilgan y que están relacionadas al EPP y al terrorismo, donde mezclan ambas cosas en las acusaciones, pero no presentan una sola prueba. La denuncia internacional será ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos y está la Relatoría de Derechos Humanos de Naciones Unidas. No es una denuncia tipo casos, porque en esa situación hay que denunciar un hecho concreto cuando una persona particular es la violada en sus derechos. Acá la acusación es genérica, es el Frente Guasu y sus senadores y se citan algunas personas, pero no muestran las pruebas.
–¿Hay otro trasfondo del conflicto que se advierte entre su sector y Cartes?
–El Gobierno identifica al Frente Guasu como su verdadera oposición. En realidad, el FG tiene delineamientos políticos críticos al modelo económico y político del tipo neoliberal que instala tardíamente el presidente Cartes, con una serie de medidas sobre todo en el ámbito económico, que van desde el endeudamiento, el tratamiento de los temas sociales, el achicamiento del Estado a expensas de los trabajadores y la precarización en algunos sectores.
–¿Qué representa el FG que molesta a los partidos tradicionales?
–Ese proyecto que plantea Cartes, no solo él como persona, sino se advierte un proyecto que viene para quedarse varios periodos. En cambio, nosotros propugnamos una alternancia de un oficialismo por una oposición que pueda estar defendiendo los mismos intereses políticos, como se da con un sector del PLRA, donde uno no siente, a pesar de que está en la oposición, que esté en una línea contraria, y en cambio sí comparte los mismos intereses.
–¿Con quién se aliarán si no es con el PLRA para 2018?
–Nuestra diferencia se da por sobre todo con la cúpula de los partidos tradicionales y en realidad nuestra experiencia desde las municipales y en este momento es que las bases, la gente común, la gente trabajadora, percibe que hay que hacer cambios en el modelo económico y social para favorecer a las mayorías. Está cansada del clientelismo político y de ser arreada para la hora de la votación; y cansada de tener que afiliarse para acceder a un trabajo, a una ambulancia.
–¿Seguirá la relación tirante entre Cartes y la disidencia al interior como fuera de la ANR?
–Cometió varios errores, entre ellos, que su selección nacional, formada totalmente por técnicos, ha entrado con una idea de que política y políticos son malas palabras. Entonces desdeñaron la colaboración de los políticos en la construcción de la propuesta o en su desarrollo y hoy se sabe que no hay técnicos impolutos. Hoy se sabe que hay ideas políticas que se plasman a través de trabajos técnicos, y no al revés. Además persiguió a esa estructura tradicional encabezada por el seccionalero, que pese a sus críticas son los que hacen el trabajo casa a casa y conocen a la gente en los barrios. Hubiera sido importante para él que haya nuevas relaciones, nuevos pactos, pero no perseguirlos ocasionando una inestabilidad política hasta ahora.
–¿Hay argumentos para un juicio político a Cartes?
–Hay miles de razones para hacerle el juicio político a Cartes: tiene varias leyes inconstitucionales y ha tenido varias decisiones políticas que rayan la falta de respeto a la institucionalidad de la República, pero a título personal tiene que terminar su mandato y no estoy a favor de los juicios políticos, porque si vamos a resolver la democracia paraguaya cada dos o tres años con juicios políticos porque no nos gustan los presidentes, sean quienes sean, la democracia va a ser muy frágil.
–¿Regresó el stronismo?
–Ojalá se vaya con Cartes el stronismo y que quede en el pasado. Esa práctica autoritaria de ver que quien piensa diferente es contrario o enemigo hay que eliminarla como sea, hay que trastocarla por valores de tolerancia y solidaridad.