El profesional precisó que esa especialización en obras de accesibilidad en las ciudades es necesaria porque “para una persona usuaria de silla de ruedas, más de 2 centímetros demás para acceder a una acera, una vereda, un sendero peatonal, le resultará una barrera arquitectónica infranqueable”.
Elkouss afirmó que “el hacer accesible una ciudad es un proceso de años en el que intervienen una serie de factores. Tienen que estar los medios, aunque sean mínimos, y tiene que haber simultáneamente técnicos suficientemente preparados en el tema. Es toda una cultura que requiere una base contextual de conocimiento”, precisó.
Entre todos. Aconsejó, además, trabajar de una manera más interdisciplinaria posible. Dijo que en países del sudeste asiático hay ciudades que no están muy lejos de ser semejantes a Asunción, donde surgieron procesos en los que se han dado los pasos suficientes y necesarios para superar las barreras arquitectónicas.
Elkouss apuntó que es fundamental conocer que las personas tienen un ciclo de vida y que “el fenómeno de discapacidad es algo universal, en el cual todos estamos inmersos. Todos tenemos familia, conocidos, que tienen algún tipo de limitación específica. Y cuando se llega a adultos mayores se va a tener un fenómeno común que es el envejecimiento”, destacó.
Acotó que incluir el problema de la accesibilidad en las ciudades en el congreso de arquitectos mostró la suficiente sensibilidad que hay en Paraguay, y sugirió a autoridades y técnicos que continúen en el proceso de buscar la igualdad para todas las personas.