Los que sí ya sentaron su postura contraria a que Cartes pueda ser reelecto fueron los obispos Lucio Alfert, del Vicariato Apostólico del Pilcomayo (VAP), y Mario Melanio Medina, prelado de Misiones.
“En nuestro país la actividad política no goza de aprecio ni de buena reputación (...) La política es la ciencia y el arte de pretender la realización del bien común en una determinada comunidad. Cuando desaparece ese bien común y se ponen los bienes particulares o sectoriales, entonces se corrompe la política y se pierde la confianza en aquellos que deben conducir la política del bien común”, afirmó monseñor Adalberto Martínez, presidente de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP), tras el descanso de lo que fue la primera sesión –ayer– de la última asamblea plenaria del año.
Para el cónclave de obispos, el país atraviesa una crisis ética ante la pérdida de principios como la justicia, el servicio, el respeto, la honradez, la imparcialidad, entre otros, que supuran a la clase política.
“La patología de toda la política se resume: el poder como fin y la corrupción. Los políticos están amenazados por la seducción del poder. El poder debería ser tan solo un medio para servir a todos los miembros de la comunidad”, recordó el arzobispo, enviando un mensaje en clave al jefe de Estado, cuyo entorno insistirá en la reforma constitucional para buscar la reelección. “La corrupción es un defecto del Gobierno, pero en Paraguay podemos acercarnos a una afirmación un poco dura: se ha transformado en la forma de gobierno”, disparó y dijo volver a la Carta Magna, “donde se invoca a Dios y donde la clase política se compromete a defender, cumplir y hacer cumplir la Constitución”.
SOSPECHOSO. Para monseñor Alfert, resulta cuanto menos llamativo que Cartes busque la reelección. “Si tiene proyectos que beneficien a toda la comunidad, puede ser; pero si es para continuar en el poder me parece dudoso”, refirió.
Medina, a su vez, se mostró en contra de la reelección. “Para la reelección, la ciudadanía paraguaya tiene que decir: vamos a reelegir por sus méritos, por sus obras y no por recursos o por fuerza política. Así nadie merece la reelección”, lanzó.
La convención de los líderes religiosos continuará hasta el viernes 11 en la casa de retiro Emaus, en Luque. La inseguridad, la violencia, el narcotráfico y la falta de justicia son otros temas que acaparan el debate de los obispos.