25 abr. 2024

Obispo insta a jóvenes a “dejar el sofá, salir a las calles y ser activos”

Destinatarios.  En toda esta semana del novenario  los mensajes fueron dirigidos a los jóvenes.

Destinatarios. En toda esta semana del novenario los mensajes fueron dirigidos a los jóvenes.

Darío Bareiro

Corresponsal

Monseñor Guillermo Steckling reflexionó –en el quinto día de la novena en Caacupé– sobre la nueva generación de jóvenes, a quienes pidió salir del conformismo para aportar a la sociedad. “El papa Francisco nos quiere constructores y protagonistas de la historia. Él nos quiere activos. Lo contrario sería lo que él llama con una famosa expresión ‘balconear’. Queridos jóvenes, no balconeen la vida, métanse en ella. Dejen el sofá, el comodismo. Salgan a las calles. No pasen indiferentes por la vida”, exclamó durante su homilía que versó sobre: Los jóvenes llamados a ser activos en el cambio social y cultural.

A renglón seguido, el predicador instó a que “no sean autómatas de la tecnología” y a evitar usarla para ocultarse de los demás. “Úsenla para vivir mejor y no para esconderse de la realidad. Basta de tantas noticias de todas partes, que las miramos desde el balcón, desde la tele o desde nuestros celulares”, refirió.

El obispo expresó que Dios quiere que el joven de hoy sea “un agente de transformación”, que promueva la paz y la armonía donde existan enojos y enemistades. “Lo peor no es que haya maldad, guerra y corrupción, porque siempre las hubo. Lo peor es la indiferencia de personas ‘normales’, como vos y yo, frente a todo lo que sucede como las injusticias y las violencias. Con una mezcla de ingenuidad y cobardía, pensamos que no nos toca a nosotros hacer frente a los problemas, sino que les toca a otros”, indicó.

En tal sentido, llamó a actuar hablando “con alguien que necesita amistad, quitar una basura, organizar una actividad para un enfermo, hermosear la liturgia, la misa, etc.”.

“Los cambios sociales y culturales de nuestro mundo son complicados, pero la respuesta no puede consistir en cultivar en el pecho un corazón cómodo y avaro. Ser activos en el cambio está a nuestro alcance”, remarcó Steckling.