El grupo de embarazadas también forma parte de las estadísticas en la población con obesidad, ya que 1 de cada 3 gestantes registra grado de obesidad, lo que afecta además la condición del feto.
La obesidad es una de las principales causas de muerte prematura y constituye el quinto factor de riesgo de mortalidad a nivel mundial, principalmente en países de medianos y bajos ingresos en los que se encuentra Paraguay.
“Es una enfermedad y a la vez un factor de riesgo que puede ser modificable con hábitos saludables mediante una alimentación sana y la práctica de actividad física periódica”, explicó la viceministra de Salud, María Teresa Barán.
Refirió que el enfoque de esta estrategia país debe ser abordado de manera integral. “Tenemos que trabajar en equipo y en conjunto. Vamos a tratar de frenar el avance de esta enfermedad. Apuntamos a que no se den casos nuevos de obesidad. Si trabajamos todos juntos vamos a lograr el objetivo”, aseguró Barán.
Recomendaciones. Para mitigar el impacto de este mal, expertos coinciden en que urge la necesidad de un cambio de conducta alimenticia por parte de la población. Una alimentación saludable, en la que se incluyan frutas y verduras, y la práctica de actividad física diaria constituyen la receta para prevenir el exceso de peso. Para erradicar este mal en los niños se hará énfasis en las cantinas saludables de escuelas y colegios de todo el país.
Las consecuencias del sobrepeso y obesidad están directamente relacionadas con problemas cardiovasculares, respiratorios, diabetes y cáncer, siendo estos responsables del 82% de las muertes por males no transmisibles.