Ese párrafo no surgió de mi pluma, sino de una reciente publicación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en Washington DC, que puede ser leída en http://blogs.iadb.org/Ideasquecuentan/2015/01/16/una-desventaja-comparativa-para-los-emprendedores-en-america-latina/.
Y por casa, ¿cómo andamos? Mi respuesta, basada en la observación y en la experiencia, es que nuestros emprendedores apenas acceden a asistencia técnica y crediticia, cuando la necesitan, y que las políticas públicas, en lugar de fomentar sus emprendimientos, los vuelven más costosos y más difíciles.
BUENOS CIMIENTOS MACROECONÓMICOS. Efectivamente, Paraguay tiene condiciones favorables para ser uno de los más desarrollados en América Latina. Va por buen camino y en la dirección correcta, hacia el desarrollo sostenible, pero sólo lentamente. Veamos sus principales rasgos. Su fortaleza macroeconómica es formidable y se ha vuelto atractivo para la reinversión de utilidades así como para inversiones nuevas. Inversores extranjeros confían en las ventajas de la rentabilidad segura que ofrece nuestro país y la repatriación de capitales ha empezado a cobrar fuerza.
AJUSTES NECESARIOS E IMPOSTERGABLES. No obstante, nuestro país necesita hacer ajustes para consolidar lo logrado hasta ahora. Ejemplos son:
• Mejorar el acceso a asistencia técnica y a créditos blandos por parte de los microempresarios urbanos y microproductores rurales así como fortalecer las pequeñas y medianas empresas (pymes).
• Reducir sustancialmente la miseria. Eso se puede lograr con masiva creación de puestos de trabajo también para mano de obra no calificada y –solo para los casos extremos de minusválidos, ancianos, mujeres embarazadas y niños– con transferencias monetarias condicionadas.
• Superar el desorden medioambiental vía reforestación y protección a especies nativas así como tratamiento adecuado de aguas y de subsuelos. Esto último pasa por la producción de abonos orgánicos a partir de biorresiduos líquidos y sólidos así como por la eliminación apropiada de desechos tóxicos de fábricas y hospitales.
PRODUCTOR Y EXPORTADOR DE ALIMENTOS, EN MEDIO DE MISERIA LOCAL. Para el desarrollo sostenible del país, las actividades del sector primario son clave. Paraguay se ha vuelto uno de los principales productores y exportadores de alimentos a nivel mundial. Los sectores proveedores de los mismos son la agricultura y la ganadería, en su acepción amplia. Vale decir incluyendo la explotación forestal así como la acuicultura y los animales silvestres. Todos ellos son fundamentales para proveer seguridad alimentaria y combatir la pobreza.
AFIANZAR LOS LOGROS Y REALIZAR MEJORAS. Los logros ya alcanzados por las actividades agropecuarias deben ser afianzados. Y a las tareas pendientes hay que darles prioridad. Se trata especialmente del fomento a los pequeños productores, de su integración económica y social, compatible con el medioambiente, así como con buenas prácticas en la producción y con certificados de calidad y de sanidad. El Marco Estratégico Agrario 2014-18 contiene directrices básicas para proceder de acuerdo con las normas vigentes y servir de base de políticas públicas orientadas al desarrollo sostenible.