El tercer grupo es conocido como el EPP de Alejandro Ramos, quien fue expulsado del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) en el 2015. Creó su propia organización conformada por su esposa, Lourdes Ramírez, sus hijos de 17 años y otros miembros.
Ramos habría intentado colaborar con la ACA, pero sus líderes, los hermanos Albino y Alfredo Jara Larrea, fueron abatidos, al igual que Idilio Morínigo.
“No podemos descartar que haya terroristas subsistentes que puedan tratar de reinstalar el grupo”, dijo al respecto De Vargas en comunicación en Radio Monumental AM.
Recordó que las vainillas servidas recogidas tras el asesinato de los ocho militares en Arroyito el 27 de agosto pasado, coinciden con otros “hechos terroristas” atribuidos a Ramos.
Una publicación de ÚH explica las internas dentro del EPP y su división. A Alejandro Ramos lo estarían acompañando 10 personas. Además de su familia, estarían Loro López con su esposa, Ladi Siqueira Krauze, Domingo Ovelar, los hermanos Luciano y Benicio Argüello y, por último, las dos hermanas de Jara Larrea, Zulma, de 18 años, y una adolescente de 17 años.
Los pobladores de Arroyito lamentaron durante el fin de semana que el ministro del Interior los vincule con el EPP, pero el secretario de Estado lo niega. “Sería muy traído de los pelos pensar que todos los miembros de una comunidad son cómplices”, señaló al respecto.
Agregó que es muy difícil probar el apoyo logístico al grupo armado, porque son personas que no están en los actos terroristas, pero resaltó las últimas detenciones.
