Técnicos de la empresa Gas Total explicaron que el empadronamiento de las garrafas consiste en hacer una prueba hidráulica y de seguridad. Una vez que se confirma que están en buenas condiciones, se le asigna unas letras dispuestas por el INTN para cada empresa, números correlativos sobre la cantidad de envases que tiene cada fraccionadora. La fiscalización tiene validez por cinco años.
Para el caso de las personas que verifican y tienen una garrafa no empadronada, deben acudir a la fraccionadora o al centro de ventas y pedir el cambio por otra empadronada, sea cargada o vacía.
Mencionaron que esto no tiene costo alguno. No obstante, advirtieron que las fraccionadoras solo aceptan cambiar las garrafas que son de su marca o las de otras empresas con las cuales tienen un convenio.
Recomiendan, por ende, que las personas traten de llevar su garrafa con empadronamiento vencido a una fraccionadora o lugar de venta que tenga la misma marca para hacer el cambio correspondiente, sin contratiempo alguno.
En el caso de la empresa estatal Petropar que entró al negocio con recargas en sus estaciones, dijeron que no saben cómo hará debido a que la empresa Petrogás, con la cual tiene un convenio, solo les entregó 1.200 garrafas.