Por Roberto Irrazábal
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La influencia del dinero de grupos mafiosos en las campañas políticas, además de deteriorar la democracia, conlleva al país al peligro de convertirse en un “narcoestado”. Los partidos políticos han mantenido por muchos años en las sombras el origen de sus fondos de financiamiento para campañas, pero la aplicación de la vigente Ley Nº 4743/12 “Que regula el financiamiento político” deberá echar luz sobre esto, nos relata el presidente del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), Jaime Bestard.
–Este es el primer año en que se están implementando controles al financiamiento de las campañas políticas, y los partidos aún no se están adaptando. ¿Cómo ve este proceso?
–Como la ley se aplicó por primera vez ahora en las municipales, y como llegó realmente en forma tardía la ley y su correspondiente reglamentación, entonces se da la situación de que hay muchas desprolijidades todavía, y casi podría decir que se está haciendo una aplicación progresiva de la ley, porque es una realidad que no podemos negar, que a los partidos no se les avisó a tiempo, y todo el control de la contabilidad no fue lo que uno querría. Pero sí va a ser más riguroso para el próximo proceso electoral.
–¿Cuáles son los puntos complejos de la ley?
–Ahí hay una cantidad de discusiones, los equipos de administración de campaña todavía no están familiarizados con la ley, de repente se discute el rol que tiene que jugar la Contraloría en relación con la Justicia Electoral; la Secretaría de Estado de Tributación también ya ofreció su participación en el control cruzado. Lo fundamental es que se haga realmente un control de los fondos públicos. Si sostenemos la teoría de que el financiamiento debe ser fundamentalmente público, entonces esos fondos deben ser controlados. Otro problema distinto es el control de los fondos privados, que son mucho más difíciles de controlar.
–¿Es más difícil controlar el dinero privado?
–En algunos países, puntualmente Bolivia, no hay aportes del Estado para los partidos, todo es fondo privado. En doctrina se discute mucho esto, el control es mucho más difícil, no se puede saber el origen, si proviene del narcotráfico o de otros grupos ilícitos. No digo que con lo público sí se puede, tampoco es fácil. En México, armaron una estructura gigantesca, el Instituto Nacional Electoral tiene recursos para el control, y sin embargo, todos sabemos que siguen existiendo manejos oscuros de los fondos, pero cuando son privados es más difícil todavía.
–¿Cómo ve el panorama en la región sobre el tema?
–Esta es una cuestión que está en la agenda de todos los organismos electorales de Latinoamérica. En el Perú se trabajó muchísimo sobre el control, así como en otros países, y todos reconocen que aún no se alcanza lo que se querría, pero es una manera de ir saneando un poco más las cosas y que se formalice más la actividad de los fondos que se manejan en política.
–Las rendiciones de los partidos sobre sus campañas para las municipales fueron recibidas por el TSJE y auditadas por la Contraloría. Sin embargo, ellos emitieron observaciones y no dictaminaron como dice la ley, ¿es correcto el procedimiento?
–Ellos interpretan, y la verdad que yo y mis colegas también, que es el Tribunal Superior de Justicia Electoral el que tiene que dictar la resolución que ordena el pago (del subsidio electoral), y ellos lo que hacen (la Contraloría) es auditar y formular las observaciones, de eso se corre traslado para subsanar esas deficiencias. Finalmente vamos a ser nosotros los que tendremos que dictar la resolución. Estimo que el próximo desembolso será en agosto.
–Las rendiciones de los partidos no fueron del todo satisfactorias y aún así se va a pagar el subsidio. ¿Habrá una consideración?
–Posiblemente tendremos que tener en cuenta eso, que la legislación y la reglamentación se hicieron muy tarde, y toda la campaña electoral y los procesos que se llevaron a cabo no dieron tiempo a documentar correctamente, y posiblemente vamos a tener que darle un enfoque de aplicación progresiva a la ley, y ser mucho más rigurosos el año que viene. Por eso creamos la Unidad de Financiamiento Político, que va a tener que trabajar muy de cerca con los partidos políticos y los que manejan los fondos de campaña, que se va a hacer con mucho más rigor el año que viene.
–La Contraloría solo auditó el dinero público. ¿Quién controla el dinero privado?
–Ese es otro tema que queda en una zona gris. Efectivamente la Contraloría dice que ellos mal pueden controlar los fondos privados porque no es facultad de ellos, pero la ley dice que se deben controlar. Alguien tiene que hacerlo y vamos a ir diseñando algún sistema que pueda ser eficiente en ese tema.
–¿Tendrá que hacer ajustes a la ley en ese sentido?
–Yo creo que sí, ya hablamos sobre eso con muchos parlamentarios y tenemos en vista algunos artículos que creemos que pueden ser mejorados en la mayor brevedad. No sé si este año vamos a poder lograrlo, pero el año que viene sí que hay que ser más exigente con esto.
–¿Cree que las internas de los partidos también deben ser controladas?
–Yo creo que sí cuando son para candidatos a cargos públicos, no para autoridades partidarias. En la Argentina y en Europa, los órganos electorales no intervienen cuando es para cargos partidarios. En Uruguay, la Corte Electoral organiza las internas de los partidos cuando son para cargos nacionales, y los partidos no tienen un tribunal electoral interno en esos casos.
–El PLRA y el Unace emitieron bonos millonarios y no dicen a quién le dieron ¿Cómo ve esto?
–La Contraloría formuló algunas observaciones sobre esos bonos y menciona que deberían cumplir algunos requisitos, y nosotros vamos a entrar ahora en el análisis a ver cómo se puede adaptar, porque nunca se hizo el control y no se puede comparar con bonos que emite una SA. Ahora vamos a ver los descargos que hicieron los partidos sobre eso y vamos a analizar. Estamos conscientes de que es un tema sensible.
–Esto podría ser canal para el dinero ilícito y la gente teme a la narcopolítica. ¿Cómo ve esto?
–Sí, la gente teme que se dé una situación similar a la de México, por eso mencionaba que allí, pese al control que hay, se dan casos llamativos de utilización de dinero oscuro con los carteles del narcotráfico, es un debate duro, la realidad supera los controles. Yo creo que la participación de la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero (Seprelad) podría ayudarnos mucho.