Las niñas de más edad, de 15 a 17 años, se presentan en mayor proporción con el descriptor de “sencilla”, apunta la primera encuesta presencial de autoestima hecha en Paraguay, al igual que en otros países del mundo.
La encuesta abarcó 300 entrevistas en enero pasado a niñas de 10 a 17 años que residen en las principales ciudades del Paraguay (Asunción, Encarnación y Ciudad del Este). El fin del relevamiento es trabajar en pos de un cambio social que permita fortalecer el optimismo de las niñas y contrarrestar los mensajes distorsionados del entorno.
En cuanto a la presión cultural para ser hermosa, que es muy fuerte alrededor del mundo, sin embargo, se vio que Paraguay “se presenta como el país donde menos presión sienten las niñas con relación a la belleza”.
“Solo 2 de cada 10 declaran haber sentido algún tipo de presión, especialmente generada por ellas mismas”, apunta el estudio de la marca Dove.
Se desarrolla que 2 de cada 10 niñas paraguayas sienten presión por adaptarse a los ideales de belleza. “Mayoritariamente declaran que esa presión proviene de ellas mismas, lo que indicaría que ya tienen internalizado ese canon. No hay diferencia significativa por edad, pero sí por ciudad. Se observa mayor presión entre las niñas que viven en Ciudad del Este y Asunción”, describe el estudio (ver infografía).
En cuanto a la confianza en sí mismas, a nivel mundial, casi 6 de 10 niñas, de 10 a 14 años, sienten confianza en sí mismas, mientras que en las niñas paraguayas de esa proporción aumenta a casi 8 de cada 10, posicionándose Paraguay con valores similares al sureste asiático. En otro tópico, la encuesta revela que 6 de 10 niñas paraguayas se declaran muy satisfechas con su apariencia. Esta aceptación baja entre las niñas mayores, de 15 a 17 años, y entre quienes residen en Ciudad del Este.