Se refirió de esta manera al jefe de Gabinete Civil de la Presidencia, Juan Carlos López Moreira; al ministro de Obras Públicas, Ramón Giménez Gaona, y al asesor económico del presidente, Francisco Barriocanal.
“Quieren quedarse con bienes públicos”, acusó Duarte Frutos en declaraciones realizadas en San Pedro durante un acto político.
“El trío angurriento acusó a los colorados de ser los deshonestos, de ser los que representan la vieja política y ahora ese trío Jiménez Gaona, Barriocanal y López Moreira es el que articula los grandes negociados del Estado”, declaró Duarte Frutos.
Recordó que López Moreira es accionista de la empresa que busca petróleo y, a la vez, coordinador de la política energética de este Gobierno.
“Es lo mismo que poner al zorro a cuidar el gallinero”, se burló el ex presidente.
Apuntó que el jefe del Gabinete Civil tiene una empresa aseguradora que ofrece servicios al Estado y cuyas acciones crecieron en un 700%.
“Esta empresa nunca tuvo la calificación para lograr compromisos de alto riesgo pero, sin embargo, agarró todo lo que hay en el Estado, en desmedro a la libre competencia, privando a otras empresas a presentarse ante el Estado”, mencionó.
Cartes-Ético. Se preguntó en dónde estaba el discurso del presidente Horacio Cartes que siempre decía que su padre le enseñó a no hacer nunca negocios con el Estado.
“¿Qué pasó de sus pibes de oro? ¿Dónde están sus fichas?, enfatizó el ex mandatario.
Dijo que este Gobierno acusa a quienes quieren lucrar con el Estado; sin embargo, ellos mismos tienen como objetivo quedarse con bienes públicos, como es el caso de la potencial explotación de petróleo de López Moreira.
Duarte Frutos reiteró que Cartes siempre pregonó la ética que recibió de su padre; sin embargo, no atiende estas cuestiones de su entorno.
Se preguntó si también esta situación es parte de la “práctica comercial” de su entorno.
Afirmó que el grupo del mandatario está “obsesionado con el poder” y que quieren quedarse en el poder para evitar cualquier investigación objetiva, de manera a salvaguardar sus negocios.
“Eso es un cinismo que no tiene nombre”, sostuvo el ex presidente.