Una de las imágenes más insólitas de este fin de semana se vio en el fútbol de China, donde un guardameta recibió un gol en el mismo momento en que bebía agua. Nadie podía creer cómo el portero Sui Weijie permitió que los rivales lleguen tan fácilmente al empate.
Saciar su sed le costó caro al arquero Sui Weijie, ya que fue multado con unos 50.000 yuanes (USD 8.000), según informó la prensa local.
“Cometí un terrible error en el partido del domingo”, se lamentó el portero, tras recibir insultos de los fanáticos de su equipo al llegar al Aeropuerto de Liaoning Shenyang, señala Infobae.
El equipo Chongqing Lifan FC, que lucha por no descender en la Super Liga China, ganaba 1-0. Pero a sólo cinco minutos del final del partido, sus defensores comenten una falta muy cerca del área propia.
Lo que nadie pensó, ni siquiera los jugadores rivales del Liaoning Hongyun, fue que el arquero iba a ser tan despistado al momento de disputar el tiro libre. La falta se ejecutó rápido, mientras el arquero estaba de espalda a la acción y bebía agua con tranquilidad cerca del poste del arco. Cuando miró hacia su meta, vio que el jugador rival ya había anotado la igualdad.