“Ellas no nos están pidiendo dinero, ni víveres, ni ningún otro tipo de ayuda material. Solo piden que seamos sus clientes y que vayamos todos este sábado 18 a la noche, a disfrutar de platos deliciosos preparados con pescado y de un ambiente maravilloso, a orillas del río Paraguay”, destaca el fotógrafo especializado en turismo Gustavo Pereira, más conocido como Zenoura.
El artista es uno de los principales promotores, junto a un grupo de amigos, para que los pintorescos comedores populares, especializados en platos de pescado, que se han instalado desde hace algunos años en la zona de Puente Remanso, en la ciudad de Mariano Roque Alonso, y que hasta ahora solo funcionan durante el día, puedan mejorar su infraestructura y pasar a recibir clientes también en horas de la noche.
“La idea es ayudar a estas sacrificadas mujeres que están tratando de volver a la normalidad luego de haber sufrido los efectos de la creciente, y que la gente pueda experimentar la grata sensación de ir a comer cerca del río a la noche, bajo las estrellas, lejos del ruido, sin paredes, probando las verdaderas delicias que ellas preparan”, relata Zenoura.
El fotógrafo y sus amigos ya han realizado hasta ahora tres encuentros de gastronomía nocturna, convocada a través de la red social Facebook en internet. “En la última cena estuvimos 223 personas, fue una noche memorable, con música, vino y pescado”, destaca.
El cantautor David Portillo es otro de los entusiastas animadores de esta iniciativa, quien suele concurrir con su voz y su guitarra a darle un especial toque artístico a los encuentros.
Mujeres dinámicas.
“Kuña kyre’y, comedores de Remanso” se denomina la página en Facebook que el propio Zenoura les ayudó a armar a las mujeres, aportando sus coloridas fotos para promocionar los deliciosos platos a base de pescado.
“Les armé la página y les regalé la foto, para que ellas mismas lo vayan administrando. Como muchas utilizan ya los servicios de mensajería como whatsapp o sus hijos tienen Facebook, se están acoplando rápidamente a estas técnicas de marketing, para estar en contacto con sus clientes”, destaca el fotógrafo.
Tradicionalmente, los comedores abren de 6.00 a 17.00 todos los días, pero si se crea el hábito, podrán abrir también a la noche. Por ahora, la idea es promover las “noches de pescado” una vez al mes.
Algunos de los locales, que se encontraban originalmente en la misma playa, junto al río, han debido mudarse unos metros más arriba, debido a la creciente. Otras, cuya edificación es de dos pisos, siguen funcionando solo en la planta alta, pero todas ofrecen una vista privilegiada sobre el agua.
Los locales, además de funcionar como pescadería y vender pescado fresco, elaboran cazuela, chupín, milanesa, piracaldo, romanitas, pescado a la parrilla, en base a surubí, patí, pacú, dorado, manguruju, solalinde, tilapia y otras especies.
"¿Qué les parece si vamos por ahí? No hay mosquitos, es seguro, habrá un excelente ambiente familiar y sobre todo podremos ayudar a esta gente laboriosa, que debe seguir haciendo frente a la creciente del río”, invita Zenoura.
Para participar de la “noche de pescado” junto al río no hace falta hacer reservas. La idea es formar grupos familiares o de amigos y acudir a pasar una linda jornada. Los comedores quedan en la Avenida de los Pescadores casi Yvaretá, a la mano derecha al llegar al puente Remanso, yendo desde Asunción.