“Para eso se metió conmigo” , dijo con risas de burla uno de los motochorros que atacó a balazos al taxista Carlos Riquelme Galeano (49), quien en compañía de su esposa fueron víctimas del violento atraco en la madrugada de ayer en el barrio Yvotyty, de la compañía de Marín Ka’aguy, de Luque.
Riquelme iba en una motocicleta con su esposa Digna Larriera (42), cerca de las 4.30 de ayer, cuando fueron baleados por los delincuentes en un callejón que los vecinos consideran peligroso por registrarse innumerables casos de asaltos a cualquier hora del día.
Cuando estaban a punto de llegar a la ruta que une Luque con San Bernardino, se percatan que los dos motochorros reducían a tres hombres. Ellos resultaron ser Roberto Torres Duré y sus hijos Cristobal Torres Díaz (23) y Erik Roberto Torres Díaz (18).
Doña Digna al ver la escena peligrosa pidió a su marido que retroceda para evitar el robo, pero los dos motochorros se percataron de la intención de la pareja, aceleraron y se acercaron a las víctimas.
A punta de pistola exigieron que entreguen todas sus pertenencias. El taxista accedió al pedido de los delincuentes, pero sacó su arma de fuego para enfrentarse a los delincuentes. “Hubo muchísimos disparos”, señaló la mujer, tras relatar lo sucedido.
La víctima acusó 3 disparos en la mano, abdomen y espalda, mientras que su esposa sufrió un refilón en la mano.
La pareja cayó al suelo y la motocicleta quedó encima del fallecido. A causa de la respuesta que dio el taxista con su arma, los ladrones se llenaron de ira y protagonizaron el fuego cruzado.
El disparo que acusó la víctima en la espalda fue de corta distancia por lo que se presume que luego de caer al suelo nuevamente fue herido con saña. La burla expresada por uno de los delincuentes al eliminar al trabajador también refuerza esa posibilidad.
El conductor de la motocicleta tenía un casco, mientras que el responsable de los disparos actuó a cara descubierta, según la versión de Larriera.
La misma señaló que se tiró al suelo y se hizo pasar por muerta, por eso se salvó. “Me alcanzó en la mano una bala, me tiré al suelo y no me hicieron caso pensando que me mataron”, dijo la afectada tras la tragedia. El fiscal de la causa Juan Carlos Ruiz Díaz, confirmó la burla que dio el asaltante.